La visita a la zona extrema sur/occidental de
Rano
Kau, nos dejó sumamente intrigados; una
vez que
dejamos nuestra maleta y enseres en casa,
volvimos a
escudriñar el sitio, que tenía un cierto
cariz sagrado; imposible
de quedar insensible ante
tanto desorden y desconcierto
ambiental.
Pudimos
ver altares rotos, piedras dislocadas que
eran en
sí mismas huellas de luchas encarnizadas
llevadas a cabo
con saña salvaje, cruel y sin piedad.
Cuando
en Europa se visitan ruinas de palacios,
basílicas y foros romanos
o de otras culturas
antiguas, se percibe que los destructores de tales
monumentos, insensibles al arte, se han llevado las
piedras para la construcción de nuevos edificios y
casas; en el propio Cuzco en Perú, los conquistadores
antiguas, se percibe que los destructores de tales
monumentos, insensibles al arte, se han llevado las
piedras para la construcción de nuevos edificios y
casas; en el propio Cuzco en Perú, los conquistadores
aprovechaban
los cimientos y paredes hasta
media
altura, para edificar sus palacios y Catedrales; pero
en este lugar de Rapa Nui, andaba todo por el suelo,
una vez terminada la supuesta batalla cuerpo a cuerpo,
en este lugar de Rapa Nui, andaba todo por el suelo,
una vez terminada la supuesta batalla cuerpo a cuerpo,
piedra
a piedra, de los antepasados habitantes, de
cuya memoria
histórica no quedó testimonio humano
alguno, aparte de estos testigos de piedra y rocas.
alguno, aparte de estos testigos de piedra y rocas.
En
este lugar se pueden ver bajo el
agua cristalina
algunos
moais en el fondo, como si fueran cadáveres
de fríoa,
víctimas, sin duda de la supuesta batalla
campal que
no dejó en pie ni a seres humanos, ni
imágenes ni de
aquella explanada de reuniones de
culto ni alltares de
sacrificios y ofrendas; un feo
espectáculo desolador; nos retiramos
muy tristes
de ver tanto desastre; tenía yo la impresión de
estar viéndolo con
mis ojos en directo.
En todo caso, dirigí una oración al Altísimo, Dios de
ellos y mío, por las almas de aquellos protagonistas...
En todo caso, dirigí una oración al Altísimo, Dios de
ellos y mío, por las almas de aquellos protagonistas...
El
sol, ya dormilón entre las nubes polinésicas, se
recostaba
sobre la bruma mullida y espusoma de la
imponente
cama oceánica del Pacífico.
Reparamos
en la inmediata puesta del astro sol:
quedamos
boquiabiertos al contemplar un increíble
espectáculo
natural formado por un cielo azul claro,
un
océano infinito y el baile sutil de unas nubes entre
casi trasparentes, pintando la tarde con tules rojizos
y dorados de lujo y fantasía.
casi trasparentes, pintando la tarde con tules rojizos
y dorados de lujo y fantasía.
Yo
recordé allí las variadas e irrepetibles puesta de
sol
de mi Granada andaluza, cuando, en mis años de
estudiante
en la Facultad de los Jesuítas de Cartuja la
Nueva, pensaba que no vería algo parecido en parte
alguna del mundo.
Nueva, pensaba que no vería algo parecido en parte
alguna del mundo.
Aquí,
reconocí que me había equivocado:
Rapa
Nui contaba con un aliado, (que no tenía, ni tiene,
ni podrá tener nunca, la mítica, bella, y la siempre tan
recordadaa como única, ciudad de Granada) : el MAR.
ni podrá tener nunca, la mítica, bella, y la siempre tan
recordadaa como única, ciudad de Granada) : el MAR.
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