"RAPANUI, ISLA DE PASCUA", 3

(¡TOCANDO UN MOAI CON mis MANOS!?)

La señorita Guía continuó:                                    

               

-. “observen esa plataforma de piedra, es la zona 
de Raro Hanáku, los famosos yacimientos de los 
que se extrajeron las rocas ( ahu) volcánicas  con 
las que se fabricaron todas las  estatuas de la Isla”;

-. “ vean en ese grupo de estatuas alineadas; son
 más de 300,a la supuesta espera de algún extraño
visitante de gran rango,   viajero – o más - del mar 
( o del cielo)”;

-. “ para los amantes del submarinismo y el buceo 
ahí tienen la zona de playas de las más bonitas y 
escondites  marinos que hay en el mundo;
disfrútenlas, si tienen tiempo”;

-.vean ese grupo de moáis que, curiosamente, 
estan colocadosde espaldas al mar y de cara al 
interior de la isla, (¿supuestos visitantes?);

-. “nadie sabe aún con certeza el significado de 
estos curiosos personajes de piedra: quizás 
personajes principales y antiguos gobernantes de 
aquella sociedad; quizás son signos e indicación 

de sepulturas ancestrales; no se sabe;

-. se dice que la Isla tuvo en su tiempo de esplendor, 
allá por el siglo VI antes de Cristo, una gran y bella
floresta; 'más que hoy!, como ven;

-. “ en seguida vamos a tomar tierra, cerca de Hanga 
Roa su capital,el núcleo más grande de la Isla, único 
habitado, Hanga Roa, su capital que tiene unoss
2.500 habitantes, de los que el 70% son nativos;

-. “aterrizamos ya en el aeropuerto de Mataveri; 
gracias por su atención, y que disfruten en este 
misterioso  y mágico mundo de Rapa Nuí. 
Buenas tardes.”

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(Don Ruál Silva y Silva, -en octubre de 1.963 Párroco 
de Ntra. Sra. del Carmen de Ñuñoa, fue designado y
nombrado Obispo de la Diócesis sureña de Rancagua, 
quiso compensar mi labor de colaboración - durante
mi estancia en Chile, haciendo estudios deuna 
especialidad pastoral en la Pontificia Universidad 
Católica de Santiago, ya que residía en esta zona-, 
invitándome a viajar con él hasta esta Isla tan llena de 
misterio, así como  de un tan bien merecido y evidente
reconocido prestigio turístico internacional.)

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Un amigo de D. Raúl, que  esperaba nuestra llegada, 
nos llevó al centro del poblado y  ocupamos nuestras 
habitaciones, cuyas ventanas que estaban  mirando al
poniente, la parte del Océano Pacífico y de cara a las
aguas y cielos de la Polinesia.

Lo primero que aprendí de un chico nativo, que andaba 
en ese hotel por motivos de servicio,  fue la palabra “ure” 
(hola); la segunda cosa que me dijo, es que no dijera 
Isla de Pascua, pues no le gustaba a los isleños, sino 
que dijera “Rapa  Nuí“,que resultaba más lindo.

Descansamos unos minutos y en seguida fuimos a la 
zona Rano Káu, cerca y al sur del aeropuerto, a ver de 
cerca y tocar con la manos fisicamente un “moai” de 
verdad; aquella experiencia me costó lágrimas de tierna
emoción, por las claras evidencias ancestrales que ellos
contiene, tanto en su realidad física pétrea como, sobre
todo, por sus valores significativos históricos, sociales
y religiosos, de unos antepasados que , como todos los
que vemos más allá de lo que ven nuestros ojos, mente
y sentidos.

¡ Cuánta hisotoria, trabajos, alegrías , penas, secretos,
ñiradas, gozos, sufrimientos humanos, fracasos, éxitos,
encierran, cuentan y contienen las huellas que dejamos
en las cosas,  que hay escritas sin palabras...!


Rapa Nui, como Machu Pichu, ... y tantas piedras vivas
dseparramadas por nuestro mundo honran nuestra gran 
historia planetaria... libros abiertos que nos enseñan a
vivir, hacer bien las cosas y evitar los prejuicios que nos 
acarrean nuestras torpezas y egoismos.


En próximas publicaciones nos adentraremos con más
precisión a la existencia tan lejana y, al mismo tiempo, 
tan cercana de los que antaño habitaron esta "islita linda"
del Pacífico sur.

Lo haré con sumo cariño y detalle.