martes, 17 de abril de 2012

RAPA NUI, ISLA DE PASCUA, 15

VII.- ZONA de AHU AKIVI.

La zona del monte y volcán Ahu Akivi (468 m),
objetivo principal de nuestra breve visita a la 
Isla de Rapa Nuí. 

Un lugar que por sí solo bien merece la pena el 
viaje a este mítico “ ombligo del mundo”, como
alguien le llamó. 

Uno de los tres volcanes másimportantes de la 
Isla con Rano Káu y  Rano karaku.

En Ahu Akivi estaba la atracción más famosa, la 
del Moai  (plataforma de piedra) donde está y 
posa el grupo de 7 moáis, primeros  restaurados
recientes científicamente, y expuestos al público 
el año de 1.960.

Es el único grupo de toda la Isla que, no  
sabemos por`qué, están de cara y mirando 
al mar. 

Se cuenta que representan a los primeros 
navegantes viajeros que llegaron al territorio 
insular de Rapa Nuí.

En la cima hay una laguna casi invisible por 
estar cubierta de totora (eneas, juncos) a la que 
se llega por un sendero  a pie ; subí con un 
grupo de jóvenes, ya  que D. Raúl no se atrevió
a correr esta aventura ; me resultó bastante 
emocionante andar por el  borde de un volcán, 
cosa que lograba por primera vez en mi vida.
Tuvimos la oportunidad, otra más, de visitar y 
ver una de las numerosas cuevas existentes y 
aún sin explorar; la cueva “Te Pau”; llegamos 
a distinguir, a pesar de la oscuridad, unos 
signos entre los que me pareció distinguir la 
JI griega y la epsilon; pero había. 

Un tiempo después he sabido que no sólo eran 
cuevas de uso exterior, sino una red de túneles 
con varios kil de recorrido por los que, tal vez 
fueron algún día remoto escondites o refugios 
en  ciertos momentos de peligro y guerras 
provocadas por los extraños visitantes o entre 
los propios indígenas de aquel tiempo.

Nos quedamos en Ahu Akivi hasta ver desde la 
altura otra puesta de sol, la última por ahora, 
que resultó más impresionante, si cabe, que las 
allí contempladas hasta ahora. 

Bajamos hacia el mar y vimos otros moais en
Tepeu, para dirigirnos a la ciudad de Hanga Roa, 
dormir la última noche en Rapa Nui.

Una pregunta nos asalta e inquieta:

¿ Cómo desapareció esta cultura ancestral de una
Isla, la más lejana habitada de nuestro planeta.

La respuesta, cualquiera que sea, no va a calmar
nuestros interrogantes; pero merece la pena 
contar algunas leyendas que existen entre los 
nativos actiales, turistas y tantos cuentistas y los
estudiosos y científicos, investigadoresy expertos
historiadores, que están interesados en saber más 
acerca del hálito misterioso que cubre como un 
manto invisible y tangible a la vez por todos los 
que a lo largo de la historia han visitado, visto y 
recorrido sus montes, playas y caminos mirando 
con asombro tanto símbolo de piedra, de pie, en
restauración, expuestos a la consideración; otros
tumbados y rotos, inacabados unos y sumergidos 
otros, sus más de 300 altares, de los que muchos 
han sido profanados y rotos con furia salvaje por 
no se sabe quien.

Haremos algunos planteamientos dejando a 
salvo la curiosidad de quien desee y pueda 
descubrir la verdad completa sobre lo sucedido 
a esos seres humanos y a su misteriosa historia 
y cultura.

El grupo de siete moáis, primeros que fueron 
restaurados científicamentey expuestos sobre una 
plataforma, también de piedra en la zona de AHU 
AKIVI de la Isala de Rapa Nuí en el año 1.960,
como ya dije.

Yo estuve allí en octubre de 1.963, cuando era
toda una noedad turística.

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