Aunque la
relación entre el Machu Pichu y Cuzco fueron fundamentales unidos, y lo siguen
siendo, hay que saber que el Machu
Pichu está y pertenece al Departamento
de Ucayali, y este Distrito y Río tiene
como capital y provincia
a Urubamba, que se encuentra a unos 80 kilómetros
de Cuzco por su parte
este, en la
selva y cuenca de la amazonía peruana.
El río
Ucayali va a dejar una huella muy importante en mi viaje a
Sudamérica,
como después veremos.
No exagero cuando afirmo que mi experiencia en estos lugares del
Continente, MACHU PICHU, RAPA NUI y otros más, que veremos, no puedo recordarlos con frialdad y ligereza, sino con el corazón cargado de emoción y los ojos llenos de lágrimas cual rocio de sus cumbres y valles; a veces me obligan a realizar pausas
de descanso y relajación repadora.
Su grandeza le viene de nacer en “tierra sagrada”, formado por dos afluentes andinos, el Tambo y el río Urubamba, que se unen en Pucalpa y recibir en su caudal las aguas sagradas del Vilcanota desde los pies mismos del Machu Pichu; después de recorrer 1.600 kilómetros se une al Marañón para engrosar la más grande arteria continental de América de Sur, el Amazonas; al ser navegable desde Pucalpa, se convierte en una vía de comunicación fluvial en la selva peruana.
Recorrí en canoa un tramo del que os hablaré muy pronto, en mi breve aventura selvática.
Ahora vamos
a disfrutar en el gran objetivo de este viaje al “Vaticano o Meca del Imperio
de Tahunatinsuyo”:
TAHUANTINSUYO
significa “cuatro regiones”, naciones o
comunidades que formaban el conjunto de ese
Imperio, fundado,
organizado, engrandecido
y dirigido por su más grande Emperador,
el genial, más
aliente , arquitecto y pontífice, el Inca Pacha Cutec.
Pacha Cutec,
hijo y sucesor de Viracoha, tras unos incidentes familiares relacionados
con la debilidad y muerte de su hermano mayor, a quien correspondía
la gobernación del Imperio por derecho sucesorio, se convirtió en el Gran Emperador absoluto,
duro, implacable conquistador
y constructor de la capital de la región centro y, por tanto , de
todo el territorio imperial, Cuzco, Ombligo del Imperio; este quedaba
compuesto así:
-1- ANTISUYO,
Ombligo del “Imperio divino”: era la zona central oeste.
Sede del
mando central y la Meca religiosa de todo inca bien nacido.
No olvidemos
que la extensión gobernada desde allí era de unos 4,000.000 de kilómetros
cuadrados.
- 2- CONTISUYO,
la zona de selva, Bolivia y parte de Argentina
andina era de los Incas Aymaras, Altiplano. tierra de guerreros y
creyentes en Viracocha, cuya sede era lo que hoy es Madre de Dios.
Un pueblo de
los aymaras guerreros que llegaron a utilizar el
arco, la
honda, flechas y el “monaco/manaco” mazo de madera con
mango.
Por lo que
tiene de curioso, recordamos que Garcilaso de la Vega
era hijo de
un capitan español, Sebastián G. de la Vega y de una mujer inca, Isabel
Chimpuocllo, nieta de Tupac Yupanqui, que había sido el antes
penúltimo emperador inca, y sobrina de Waina Capac; de aquí que el
Inca Garcilaso en sus Crónicas y Comentarios Reales haga uso (y
abuso) de sus antepasados y la sangre real que circulaba por sus venas.
Merece la
pena repasar sus escritos.
Por si todo
lo dicho fuera poco, añadimos que el gran Pacha Cutec
Yupanqui,
creador de esta maravilla mundial de Machu Pichu,
procedía de
este hermoso territorio.
Además de
ser un buen Emperador, le sobró tiempo para otras aficiones; se sabe que tuvo 3 esposas; pero, dada
la práctica poligámica de los incas,
mantuvo relaciones con muchas más
mujeres; presumía de sus más de 300 hijos.
No está nada
mal; O sí; depende del punto de vista de cada uno.
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