1.- Soñé
que la Cruz del Sur
se inclinó
sobre mi lecho,
acarició
mis mejillas,
y estampó
sobre mi frente
el más
dulce de los besos.
Con su voz
de santo y seña
modeló mi
pensamiento,
rompió
todas las murallas,
me donó el
conocimiento
sobre el
contenido incierto
del cielo
y el Firmamento.
Me dio
primicias de amor
al abrirme
las entrañas
de Rapa
Nuí la Grande,
la Isla de
mis delicias.
Tumbado
sobre una roca
de
antiguos ceremoniales,
desnudo cual
los moáis,
de
habitantes ancestrales;
con mi
cabeza en sus manos
y su
mirada en la mía,
me dijo,
indicando el fondo
de las
aguas misteriosas
del sur,
junto a Rano Kau:
.......
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