jueves, 11 de julio de 2013

A QUIEN CORRESPONDA, DCCCXIV

Matián en la memoria, 15

Reportaje de un viaje:
Cumplimos nuestro acordado compromiso de recorrer los puntos más interesantes del actual  Yacimiento Arqueológico en torno al Cerro de Malagón.
No coincido del todo con los criterios que corren en los medios informáticos sobre ciertos puntos, por creerlos equivocados con la realidad histórica de los ancestrales habitantes de esta zona:

Primero: 
Si hay huellas auténticas de la Edad de Piedra Tallada, su antigüedad es mayor de la que se dice en los medios de comunicación y que el concepto que se han formado de este sitio los investigadores y autoridades que hasta ahora han intervenido.

Segundo:
Si hay huellas a la vista de un yacimiento de cobre y su correspondiente lavadero del metal sustraído en la altura media del Cerro, ello se debe a que sacaban el agua de las entrañas del mismo a través de la misma mina que el mineral; por lo hoy podría servir de acceso directo a la cavidad existente en el corazón del Cerro.

Tercero: 
No comprendo que una investigación técnica y seria, proceda a buscar algo con el procedimiento de romper de cuajo los muros de contención de un antiguo poblado, como lo hecho en los propios cocederos de cerámica rústica y restos de las chabolas que habitaron sus alfareros.
Nuestro conocimiento, palmo a palmo, de este maravilloso lugar, nos obligan en conciencia a exigir un mejor trato y dedicación científica al conjunto, donde las huellas de nuestros ancestrales antepasados son
todo el suelo que pisamos 

Añadimos una advertencia relacionada con la Necrópolis de Malagón, cuyos sepulcros están siendo salvajemente profanados, no se justifica lo que se hace, no sólo aquí, sino en miles de lugares del Planeta.
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