martes, 4 de junio de 2013

A.Q.C., DCCXC

EL MUNDO QUE NOS RODEA, XXII:

La aldea de Matián había sido una Propiedad privada que llevaba siglos indivisa, pues los herederos únicos podían explotar las tierras de secano, que producían varios miles de fanegas de trigo, cebada, centeno y garbanzos, y tierras de regadío donde se cosechaban cantidades de maíz, remolacha, patatas  y hortalizas, así como los ganados, de los que se obtenían abundancia de quesos y venta de corderos y reses adultas de carne.
Sus labradores y pastores ancestrales procedían de pueblos vrcinos, Oria, Cúllar etc, era una comunidad humana con las características similares en las que prevalecía la amistad, la abundante procreación de hijos para el mucho trabajo, y las tradicciones heredadas de sus distintas procedencias:
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